“Que las razones del Derecho nada valen frente al Poder cuando quien ostenta éste decide ejercerlo a fondo sin reparar en medios…”

“Que las razones del Derecho nada valen frente al Poder cuando quien ostenta éste decide ejercerlo a fondo sin reparar en medios…”. Pero existimos aún personas comprometidas con la lucha y el cambio social.

Mi anhelo al estudiar la carrera de jurisprudencia fue, y aun es, la de crear una base de conocimientos en el área legal para cuando sea mi determinado momento, dotarme de las herramientas suficientes para poder destruir de las raíces, las mañas politiqueras que los gobernantes han acostumbrado al ecuatoriano a ver y vivir.

Pensarán muchos pues, que talvez es un sueño o una utopía el lograr éstos objetivos, ya que varias veces se ha escuchado la frase “cuando uno es joven es revolucionario”, pero no se necesita ser joven para ser revolucionario, lo único que se necesita es tener sus ideales y objetivos marcados de forma clara y determinante, los mismos que deberán tener principios y valores que concuerden con la dinámica de la sociedad, y de no hacerlo, estos valores deberán ser lo suficientemente fuertes en su esencia para modificar el modus vivendi del ecuatoriano.

En sus manos estuvo y está, señor lector, la manera de contribuir al cambio social orientado hacia un correcto horizonte de principios y enseñanzas; más, en nuestras manos aun está el saber receptar todo lo dotado.

El Derecho, gran fuente de poder que se nos dota algunos seres humanos, solo los que lo aprendemos, sabemos como utilizarlo (no manipularlo), ya que como alguna vez se escuchó en un aula “a  la ley no hay que violarla, hay que enamorarla..”, por esa razón, el Derecho vale mucho frente al Poder si sabemos como utilizarlo. Para eso esta la Universidad, para darnos esos conocimientos que nos permiten en un futuro no lejano, utilizar la herramienta, el poder del Derecho, porque no tiene más fuerza el que sabe como manipular a la gente con un discurso basado en la retórica, sino el que sabe como utilizar el Derecho para sus fines pertinentes, sean cual fueren éstos.

Sin embargo de lo antedicho, es cierto que muchas veces el Poder arrolla al Derecho, y varias veces ha sucedido en un país tan manipulable como es el Ecuador. Ahora yo pregunto, ¿Qué hemos hecho para contrarrestar éstos abusos?... Nada creo yo, más que sentarnos a observar como nuestra burbuja de individualismo funciona y tratar de parcharla con sueños para que no se destruya con las realidades de los demás. Despertad guardianes de la ley, que el tiempo de estudio no es en vano, que solo la educación y los conocimientos son capaces de romper las cadenas que mantienen atrapada en grilletes a la libertad. Dejemos de ser espectadores del Derecho, y pasemos a ser actores en la lucha contra la injusticia; pensad que el joven nunca debe morir, y nosotros, los abogados, somos los únicos que podemos sobreponer el Derecho sobre el Poder.

El Barba Roja.